37 años de vida y millones de recuerdos...

Echo la vista atrás y vienen a mi mente tantas vivencias compartidas en nuestra gran Banda de Cabecera que podría estar hablando días enteros y no acabaría.
Parece que fue ayer cuando encabezados, animados y apoyados, por nuestro gran amigo y compañero, Antonio García Cabrera, entre otros, allá por el año 1975, un grupo de 45 componentes aproximadamente, fundábamos este colectivo. Desde entonces y hasta ahora, momentos de ilusión, alegría y devoción, han invadido mi corazón. Mucho tiempo de trabajo que lejos de ser un ‘incordio’, era lo más bonito del día, era, tal vez, lo que estaba deseando hacer al salir de trabajar, dirigirme a la Fuente del Pisar, para arrancar el ensayo. En mi primer año, abría camino a la Banda con el estandarte, todo un placer escuchar esas marchas que siempre van a quedar en mi memoria. Un año después, me propusieron hacerme cargo de los platos, al tener experiencia con ellos durante el Servicio Militar. Desde entonces, los platos y yo, fuimos inseparables hasta el año 1986 cuando concluyó mi primera etapa en la Banda. Incluso, recordando al escribir estas líneas, nunca olvidaré la compañía de mis amigos Tomás Arboledas, a la caja, y Juan Carlos Trujillo al bombo ‘barriga’. Jamás he dejado de estar interesado por este colectivo con el que en mis años de juventud iba haciéndome mayor.

En el año 2008, mi hijo, entró a formar parte del grupo, como yo, en la percusión. Él se animó a tocar el tambor y tras muchas palabras de apoyo de mi familia y amigos de la Banda, decidí volver a militar en ella. En 2011, tuve el placer de revivir tantos momentos, que aunque la lluvia apareciese en nuestro camino, fue tiempo suficiente, para que cuando lanzáramos al viento los ‘vivas’ a Ntro.Padre Jesús Nazareno y a la banda antes de empezar el pasacalles, mis ojos volvieran a demostrar la emoción que me embargaba por dentro. Regresé, porque así el destino lo quiso, con un báculo y al lado de Juan Carlos Trujillo, como en los viejos tiempos, ¡qué coincidencia más hermosa!. Espero que sigan viniendo muchos años más, porque no se qué tendrá la Banda, mi banda, que es un imán del que nunca podré ni querré separarme.

Antonio Díaz Álex.